La recuperación de la memoria histórica y cultural de pequeñas poblaciones como dispositivo de reconocimiento social, cultural y educativo

The recovery of the historical and cultural memory of small populations as a device for social, cultural and educational recognition


Alirio Valencia Agudelo 1

Resumen

El presente artículo presenta los resultados de seis trabajos de investigación realizados en los municipios antioqueños de Pueblorrico, Caicedo, Fredonia, Itagüí, Liborina y Concepción entre los años 2007 y 2020, enfocados en recuperar la historia y la memoria cultural de estas localidades. Es un trabajo que exploró, desde los actores del territorio, las percepciones e importancia de su historia y del patrimonio tangible e intangible, hasta las estrategias o insumos para gestionarlo y articularlo a los instrumentos de planificación del territorio, observando más allá de los límites y elementos físico-bióticos, por lo que se incluyeron dimensiones socioculturales, políticas, económicas y educativas. Estos trabajos se realizaron a través de la metodología de Investigación-Acción-Participación, y la comunidad también se convirtió en parte del equipo investigador. Para ello, se conformaron grupos de trabajo que abordaron diferentes áreas, como historia local, economía, ecología, educación, deporte, religión, cultura, patrimonio, recursos humanos y vida administrativa, entre otras áreas. Fruto de estos trabajos, se publicaron ocho libros impresos y ocho digitales con igual contenido, los cuales se constituyeron en parte de la Cátedra Municipal de cada localidad investigada para que así las actuales y futuras generaciones conocieran su pasado y puedan imaginar, soñar y construir su propio futuro y, a la vez, lo vean como dispositivo de reconocimiento social, cultural y educativo.

Palabras clave: Cultura, comunidad, Antioquia, historia, memoria.

Abstract

This article presents the results of six research works carried out in the Antioquen municipalities This article presents the results of six research works carried out between 2007 and 2020 that focused on recovering the history and cultural memory of the following municipalities of Antioquia: Pueblorrico, Caicedo, Fredonia, Itagüí, Liborina and Concepción. This work explored, from the actors of the territory, the perceptions and importance of its history and tangible and intangible heritage and the strategies or inputs to manage and articulate it to the planning instruments of the territory. This was done seeing beyond the limits and physical-biotic elements, so it included socio-cultural, political, economic and educational dimensions. These works were carried out through the Research-Action-Participation methodology, in which the community became part of the research team. In order to do that, working groups were formed that addressed different areas, such as: local history, economy, ecology, education, sports, religion, culture, heritage, human resources and administrative life, among other areas. As a result of these works, eight printed books and eight digital books with the same content were published, which became part of the Municipal Chair of each investigated locality, so that current and future generations know their past and can imagine, dream and build their own future and, at the same time, see it as a device for social, cultural and educational recognition.

Key words: culture, community, Antioquia, history, memory.


Introducción

Los municipios de Pueblorrico y Fredonia están ubicados en la región del suroeste de Antioquia, tierra cafetera y ganadera con una inmensa riqueza en flora y fauna. Distan de Medellín, por carretera, tres y dos horas respectivamente. Caicedo y Liborina se ubican en la región occidente a tres horas de la ciudad de Medellín. Son municipios que viven de la agricultura y la explotación minera, y cada uno tiene una población aproximada de 8.000 habitantes con las mismas características de los anteriores. Itagüí se ubica en el Área Metropolitana de Medellín, siendo el municipio más industrializado del país, con una población que supera los 250.000 habitantes (Censo DANE, 2018). Por otra parte, Concepción se ubica en la región del oriente, en la llamada “Zona de embalses”. Es un pequeño municipio que vive de la agricultura y el turismo. Es de los pocos pueblos de Antioquia que aún le da una adecuada conservación a su patrimonio arquitectónico, pues conserva sus calles empedradas y sus casas construidas en tapia, con teja de barro y amplios ventanales en madera. Esto hizo que en 1999 el Ministerio de Cultura lo declara Patrimonio Histórico y Cultural de la Nación.

Así vemos que

Todo pueblo sin memoria y sin identidad está condenado al olvido y a repetir su propia historia. Cuando se carece de sentido de pertenencia a ese terruño donde se vive, cuando no se tiene noción de la historia de ese espacio y de ese entorno, cuando no hay conciencia del propio destino y no se tienen testimonios, entonces se habita en la nada, en algo así como un limbo existencial: no hay futuro y se hace parte del vacío. (Spitaletta, 2011, p. 23)

Es por ello que desde el programa de Comunicación Social de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD–, a partir del año 2007 el semillero de investigación Comunidad y Desarrollo –SICODES– ha venido haciendo esfuerzos en distintos municipios de Antioquia para motivar a las administraciones municipales, gestores culturales, líderes comunitarios y comunidad en general para que no dejen perder en el olvido la historia de su territorio, y puedan desarrollar proyectos de recuperación de su memoria histórica y cultural, toda vez que la realización de este tipo de trabajos se convierten en un aporte necesario y significativo al conocimiento y rescate de la historia, a la búsqueda de la identidad y que, sin duda, contribuirá a aumentar el sentido de pertenencia de cada uno de los habitantes con el entorno particular, a saber, con la vereda, con la calle, con la iglesia, en fin... con la vida cotidiana.

Por lo tanto, ¿qué hacer para que las comunidades locales no dejen perder en el olvido la historia y la memoria cultural de sus municipios? Es una pregunta que a diario se hacen los grupos sociales y gestores culturales de los distintos municipios del país. Así vemos que en las últimas décadas han adquirido importancia los movimientos de reconstrucción de memoria histórica de grupos sociales afectados por los procesos de invisibilización, como las mujeres, los afroamericanos, los indígenas, las culturas colonizadas, los trabajadores, los perseguidos políticos, etc. En este sentido, vemos que la reconstrucción de la memoria afectada por estos procesos no constituye un mero esfuerzo de investigación, sino que también y fundamentalmente requieren de un activismo social orientado a desmitificar estereotipos y verdades dadas, profundamente arraigadas en la cultura dominante. Por ello, se deben adelantar esfuerzos para que los municipios y comunidades marginadas se concienticen y no dejen perder ese rico legado cultural que tienen y que viene de generación en generación. Para ello, es necesario que las universidades y otras entidades de carácter educativo o social los apoyen y asesoren para realizar trabajos de investigación que les permita recuperar su historia, sistematizar esa información y publicarla en formatos escritos y digitales para que así las actuales y futuras generaciones conozcan su pasado y, desde luego, propiciar mecanismos para que la comunidad de hoy pueda imaginar, soñar y construir su propio futuro.

En este orden de ideas, si hacemos un análisis de lo que representa la historia y la memoria en el contexto historiográfico, vemos que se ve como el conocimiento de los hombres en el tiempo (Marc, 2001) o como lo plantea Jacques Le Goff (1991) cuando dice que “la historia es el conocimiento de las sociedades humanas y los grupos organizados” (p. 76). De igual manera, autores como Belvedresi (2006), Castaño y Jurado (2019), y Yepes (2019) hacen importantes aportes acerca del papel de la memoria, el olvido y el perdón; los efectos políticos y el orden simbólico de los trabajos oficiales de memoria; el discurso dominante en la construcción de la memoria oficial en Colombia, entre otras consideraciones.

Desde este enfoque, la historia no puede ser asumida como un simple relato de las instituciones, de los grandes acontecimientos y de los personajes relevantes o míticos. ¡No! La historia también debe pensarse en las pequeñas poblaciones, en los personajes olvidados, en los relatos que nacen en veredas y corregimientos, es decir, en todo aquello que se sucede en lo local.

Por lo tanto, para la Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD– es sumamente importante saber que, mediante el desarrollo de estos seis proyectos se promovió no solo la investigación, sino además la proyección social y la transformación social, cultural y educativa de cada uno de los habitantes beneficiados, toda vez que se está recuperando la historia y ese legado cultural que el pasado ha dejado en distintos municipios de Antioquia, para que así las generaciones futuras conozcan a fondo de dónde vienen y se comprometan con el devenir de unas comunidades que, a pesar de las vicisitudes y olas de violencia, ha sabido sostenerse en pie firme y con una mirada futurista.


Metodología

Estos seis proyectos de investigación se realizaron en los municipios antioqueños de Pueblorrico, Fredonia, Caicedo, Liborina, Itagüí y Concepción, entre los años 2007 y 2020, a través del método de Investigación, Acción, Participación –IAP–, metodología que tiene orígenes universales y grandes retos actuales, como lo señala Fals Borda (1999). Es así como la comunidad se convirtió en protagonista del trabajo al hacer parte del equipo de investigación, toda vez que se organizaron, capacitaron y trabajaron por equipos de acuerdo con unas áreas propuestas en cada uno de los proyectos. En cada localidad se aplicó la misma metodología y de manera secuencial, es decir, cada trabajo se realizó por separado y tuvo una duración entre 10 y 18 meses, acorde a las siguientes fases:


Socialización y divulgación del proyecto

En esta primera fase se convocó a los distintos grupos organizados y a la comunidad en general de los municipios investigados, como empleados de la alcaldía, concejales, docentes, estudiantes, líderes comunitarios, empleados públicos, amas de casa, comerciantes, entre otras personas que se convirtieron en informantes clave para presentar y socializar el proyecto que se realizaría. Posteriormente, se escogió a cada una de las personas que coordinarían los equipos de trabajo para abordar las distintas áreas y, finalmente, se les brindó la capacitación en lo referente a técnicas de recolección de la información, procedimiento para la realización de entrevistas y consulta de archivos, sistematización de la información y organización de informes. Esta capacitación se realizó a través de eventos académicos, conversatorios y talleres teórico-prácticos, observándose un decidido apoyo y compromiso por parte de la comunidad, ya que eran conscientes de que el trabajo iba en bien del municipio y de todos sus habitantes, como dispositivo de transformación social, cultural y educativo.


Recolección y sistematización de la información

En esta etapa, la más larga y dispendiosa, los equipos se multiplicaron y aprovecharon todo el recurso humano de la comunidad para iniciar un trabajo de campo debidamente planeado y organizado donde se tuvo un contacto directo con las diferentes instituciones y comunidad del área urbana y rural, apoyado en formatos que permitieron una adecuada recolección de la información. En este sentido, se consultaron seis archivos parroquiales y ocho de entidades del orden municipal; se realizaron 125 entrevistas, especialmente a personas de avanzada edad; se aplicaron ocho encuestas y se organizaron 24 conversatorios para cotejar la información recolectada. Esta etapa fue permanente durante el desarrollo del proyecto, ya que fue liderada por el equipo de investigadores, quienes estuvieron atentos a recibir la información de parte de los equipos para sistematizarla, y así organizar el informe final.


Presentación y publicación de resultados

Luego de que se tuvieron los resultados de la investigación debidamente sistematizados, se organizaron eventos académicos, conversatorios, tertulias y exposiciones fotográficas en cada uno de los municipios, a fin de socializar dichos resultados y aclarar posibles dudas frente a datos recolectados. Esta etapa estuvo a cargo del equipo de investigación que procedió al diseño del texto para la publicación de los libros físicos y digitales de cada uno de los proyectos, observándose algunos impactos en cada una de las comunidades, como por ejemplo: el aumento de sentido de pertenencia de los habitantes por su territorio, la constitución de Centros de Historia en tres localidades, la implementación de la Cátedra Municipal en los municipios de Caicedo y Liborina, y la capacitación de 48 grupos sociales en temas como la investigación participativa, la gestión de proyectos sociales, el desarrollo comunitario y el trabajo en equipo.


Resultados y discusión

En cada uno de los municipios donde se realizó el proceso de investigación fue fundamental el apoyo y vinculación de los grupos sociales y comunitarios, quienes se fortalecieron en sus procesos de trabajo y gestión. Las juntas de acción comunal, por ejemplo, dinamizaron su trabajo y crecieron en número de integrantes; los grupos culturales se revitalizaron y ampliaron su oferta de servicios; los docentes y estudiantes pusieron en práctica el servicio social y la investigación; los líderes comunitarios pusieron en práctica el trabajo en equipo; y, por último, las entidades del orden municipal actualizaron sus archivos e inventarios.

Para alcanzar estos resultados la Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD– puso su grano de arena, haciendo posible que las mismas comunidades recuperaran su pasado histórico. Así, vemos que fueron muchos los días que se escudriñarnos archivos y fuentes bibliográficas, se consultaron documentos y actas de reuniones de las juntas de acción comunal y se habló con diferentes personas que contaron anécdotas, hechos y realizaciones de cada uno de los municipios. De esta manera, se rescataron muchas historias y secretos que estaban bien guardados en la mente de campesinos que aún recuerdan cómo se conformó su vereda, cuáles fueron las primeras familias que llegaron al territorio, cómo era la vida en tiempos pasados y por qué era importante preservar su patrimonio histórico y cultural.

Si bien es cierto que el trabajo se realizó en seis municipios antioqueños, los libros publicados como resultado de la investigación fueron ocho, toda vez que en el municipio de Pueblorrico se realizaron tres trabajos y se publicaron los libros “Pueblorrico 100 años de vida municipal”, “Historia de las veredas de Pueblorrico” y “Pueblorrico 150 años de historia”; mientras que en Fredonia se publicó el libro “Historias de mi vereda”; en Caicedo se publicaron los libros “Monografía de Caicedo” e “Historia de las veredas de Caicedo”; en Itagüí se publicó el libro “Santamaría el barrio de los gitanos”; y en Liborina se publicó el libro “Liborina pueblo de plazas. Es de anotar que en el municipio de Concepción ya se finalizó el trabajo de investigación y en estos momentos estamos pendientes de la publicación del libro.

Estamos seguros de que en estos trabajos fueron muchas las cosas que se dejaron sin contar, que se fueron con el recuerdo de quienes ya murieron o de aquellos a los que no logramos entrevistar o no supimos llegar. Otras personas vendrán luego a escudriñar ese pasado y a profundizar un poco más sobre diferentes temas. Tal vez encontrarán datos nuevos y contarán otras historias; mirarán con otros ojos algo que el grupo de investigación no vio o que, visto, no lo consideraron importante. Seguramente será un trabajo más completo y bien documentado, con un mejor tratamiento del lenguaje y con una mayor profundización en el proceso investigativo. Sin embargo, se sintió una inmensa satisfacción al poder entregar ese trabajo a todos los pueblorriqueños, fredonitas, caicedeños liborinos, itagüiseños y concepcioninos, ya que los libros publicados son obras que se conciben como un homenaje a cada uno de los habitantes, como un reconocimiento al valor de su trabajo y al significado de sus tradiciones felizmente conservadas en esa rica reserva de la municipalidad; y, además, para analizarlo fue necesario trazar un recorrido por innumerables rutas, senderos y caminos, pues se trató tanto de las veredas, como de los corregimientos, los sectores o cada una de las calles, en fin, de todo el territorio en su magnífica extensión y en su inagotable diversidad.


Conclusiones

Jacques (1991) afirma que “la memoria intenta preservar el pasado sólo para que le sea útil al presente y a los tiempos venideros. Procuremos que la memoria colectiva sirva para la liberación de los hombres y no para su sometimiento” (p. 1). Así vemos que estos trabajos se realizaron dada la importancia que tiene en los tiempos actuales la conservación de la memoria, ya que les permitió a las comunidades preservar su identidad y recordar de dónde venimos, quiénes somos y cómo ha ido evolucionando cada uno de los pueblos.

Son seis trabajos que se realizaron basados en la participación y en la sabiduría de la experiencia de sus mismos habitantes. La importancia de todo ello radica en que podemos reflexionar sobre nuevas vivencias y podemos evitar no tropezar dos veces en la misma piedra al recordar el pasado a través de la memoria.

La participación comunitaria fue fundamental para el logro de los objetivos propuestos. Fue un esfuerzo consciente de los grupos humanos de cada uno de los municipios por encontrar su pasado, sea este real o imaginado, valorándolo y tratándolo con especial respeto. Así, vemos que fue fundamental la participación de niños, jóvenes, estudiantes, docentes, lideres comunitarios, funcionarios públicos, entre otros.

Fruto de ese trabajo se publicaron los libros “Monografía de Caicedo: primer municipio no violento de Colombia” (2007), “Pueblorrico: Cien años de vida municipal” (2011), “Historia y relatos de mi vereda” (2012), “Historia y crónicas de las veredas de Pueblorrico” (2013), “Historia de las veredas de Caicedo” (2015), “Pueblorrico 150 años de historia” (2016), “Santa María el barrio de los gitanos” (2018), “Liborina: Pueblo de Plazas” (2020).

Cada una de estas publicaciones se convirtieron en material pedagógico para el desarrollo de la Cátedra Municipal en los distintos establecimientos de educación. Este es un programa que busca, de alguna manera, la forma de hacer que los estudiantes empiecen a conocer más sobre su territorio o municipio con el fin de crear sentido de pertenencia.

Finalmente, debemos decir que un paso clave para empezar a reconocernos como conglomerado es el de conservar una memoria cultural, rescatar antiguas gestas, preservar el patrimonio arquitectónico e histórico –tal vez escaso pero valioso-, recuperar el legado de hombres y mujeres que con su empeño y dedicación forjaron obras para beneficio de todos y, desde luego, propiciar mecanismos para que la sociedad de hoy pueda imaginar, soñar y construir su propio futuro.


Referencias


1 Alirio Valencia Agudelo. Comunicador Social, Especialista en Pedagogía para el Desarrollo del Aprendizaje Autónomo, Magíster en Ciencias Sociales de la American Andragogy University de los Estados Unidos. Docente ocasional de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia –UNAD– desde el año 2000 a la fecha; integrante del grupo de investigación “Sujeto, Mente y Comunidad” –SUMECO– y coordinador del semillero de investigación Comunidad y Desarrollo –SICODES–; presidente del Centro de Historia de Pueblorrico, Antioquia. Ha publicado los siguientes libros como resultado de trabajos de investigación: “Poemas de nuestra tierra” (1994), “Pueblorrico un pueblo en busca de su identidad” (1999), “Camino a la felicidad” (2001), “Un sueño convertido en tragedia” (2007), “Monografía de Caicedo: primer municipio no violento de Colombia” (2007), “Cátedra Municipal de Caicedo” (2008), “Pueblorrico: cien años de vida municipal” (2011), “Historia y relatos de mi vereda” (2012), “Historia y crónicas de las veredas de Pueblorrico” (2013), “Historia de las veredas de Caicedo” (2015), “Pueblorrico 150 años de historia” (2016), “Santa María el barrio de los gitanos” (2018), “Liborina: Pueblo de plazas” (2020).